Conociendo mundos.

 Decía el escritor checo Ivan Klima, que cuando se ve el mundo siempre desde el mismo lugar uno embrutece y es totalmente cierto. Lo he vivido aunque no deseo entrar en detalle, tampoco es cuestión de que nadie se de por aludido.

Pero el ver siempre la misma calle,el mismo bar y a los mismos personajes termina embruteciendo, el mundo se vuelve de un solo color,., que suele ser negro. Éstas personas tampoco suelen leer, no digo ya un libro, si no un periódico, a veces he comentado algo leído en prensa y ha sonado a chino, pero además noto que molesta, no va con ellos. Para mi ha debido ser como un : ya ves hay gente medianamente feliz sin saber nada del mundo, ni de la historia.Lo que yo llamo el ABC, duermo, como y alguna cosa más y ahí termina todo. Imagino que por algunos lugares no pasé por pura casualidad si no porque debía aprender algo, o quizá otros de mi.

Yo nunca he tenido miedo a dar el primer paso, eso no significa que todo haya salido bien, pero los que no dieron ninguno se debieron quedar en una especie de limbo, un limbo que la Iglesia Católica dice no esta mal, y le llaman el limbo de los justos. Dentro de la Iglesia también hay de todo,me refiero a que hay curas de pueblo, de esos que todo el mundo conoce y que conocen dos o tres pueblos más porque faltan sacerdotes y tienen que ir de aquí para  allá y los llamados misioneros, trotamundos en definitiva, esos si dieron el paso con los riesgos que conlleva.

Lo tengo claro es cosa del destino, a veces algo cruel.