Los ermitaños del S.XXI

 

Ermitaños ha habido a lo largo de toda la historia, y en el siglo XXI continua habiendolos.Son personas que por motivos que desconocemos huyen de la civilización refugiandose en lugares aislados, es el caso de Domicio, ya el nombre de por si es extraño, yo nunca lo había oído.

El lugar elegido es un antiguo pueblo abandonado de las montañas leonesas proximo a Asturias.
Antaño hubo 200 personas, no hay electricidad y en cuanto al agua, un abrevadero para el ganado que pasta por la zona.Tampoco tiene telefóno, con lo que la soledad es absoluta, solo acompañado de dos perros.Este hombre no es lo que apriori pueda parecer un persona sin ningún recurso, pues tiene dos coches modernos y con gran capacidad. Cuando quiere tomar algo baja a Cistierna que es el pueblo mas cercano
Estas personas suelen sentir un vacio existencial, no les interesa lo que a la mayoría.Antaño los ermitaños eran todos creyentes y esto era una forma de conectar con Dios, no se si en la actualidad también es así.La soledad en estas personas suele proporcionarles cierta paz, son espiritus libres en el más amplio sentido de la palabra.
Domicio fue minero y tiene su paga, no necesita cultivar para vivir, cuando necesita viveres baja al pueblo más cercano y los compra.Hay un libro publicado al respecto que no he leído, porque entre otras cosas está en italiano.Entre los eremitas también hay algún monje, suelen andar por Georgia. Esto no es que sea una moda, pues son pocos los que se atreven a dar el paso. Vivir sin telefóno es muy arriesgado, porque en pleno campo puedes tener una caída u otro problema, y no tienes a quien recurrir.
Durante el día tiene un pase, pero cuando llega la noche no lo imagino, es la oscuridad más absoluta, aunque tenga un quinqué, y en invierno quiero imaginar una chimenea, aunque en las fotos de las casa que he visto no se ve salida para humos.León es la zona más fria de España y vivir sin ninguna comodidad debe ser bien dificil.


Este es un eremita irlandés, dice haber renunciado a todo, pero en el espacio que ocupa parece haber cierta comodidad.La mayoría de los ermitaños son hombres, aunque hay algunas excepciones.









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