Henar Ortiz, con el hacha de guerra en la mano

 

                                          Esta señora que ven aquí es Henar Ortiz, que según la prensa no se calla. Yo creo que debería leer algo sobre la filosofía estoica por su bien. Dice el estoicismo del que supe no hace mucho, ojala y hubiera sabido de ellos antes, que a veces es mejor callarse, no solo a veces si no siempre. Mostrar odio en público es un error, puede que entre los amigos "funcione", porque los amigos parece que tienen que estar siempre para todo, odio incluido, yo muchas veces me he distanciado, porque el odio de mi amigo no tiene porque ser el mío.

En el caso de Henar lo tiene peor, porque ese odio va contra su sobrina Letizia y por ende al resto de los componentes de la familia real. Ya a estas alturas no tiene solución. Dicen que la sobrina es "especialista" en devolver el golpe, de esas que no perdonan ni un soplo, o sea también sabe odiar, el asunto viene de familia; pone en una lista a aquellos que la menospreciaron y los fue tachando uno a uno, de hecho al hoy rey no le queda ni un amigo de juventud. Pero es que todos no nacemos con ases y reyes, algunos nacen con bastos y espadas. Lo que algunas personas se pueden permitir a otras les está vetado. 

Henar se ha alienado con la otra "sobrina" o mejor dicho la hija de la que fue su sobrina, Q. E.D. Las hermanas no tuvieron la misma suerte. La joven parece que no tiene contacto con su tía.

Carla Vigo la hija de Erika Ortiz va a su aire. Cuando una madre fallece y deja a una niña de dos años en manos del  padre y la novia de este pueden suceder dos cosas, que sea un padre que sepa educar, o que la niña quede a su aire con una madrastra que también vive a su aire. 

¿Qué puede llevar a una mujer a quitarse la vida y dejar a una niña de dos años en manos del padre? Y lo que viniera después,, realmente no lo sé,ni estoy para juzgar a nadie, el que se quita la vida posiblemente no encuentre otra solución. Nunca me ha gustado entrar en dilemas que no son el mío. 

Henar motivo del artículo ha tomado partido por ella por eso de que pasan de la sobrina y también de ella. Después de los llantos del entierro de Erika, la vida se normalizó parece que para la madre también, aunque a lo mejor la procesión va por dentro. 

Andar a la greña nunca me ha gustado, pero si además la familia en cuestión tiene la sartén por el mango todavía menos.