El obispo y las monjas.

 La España cañí tiene varios visos. Siempre no ha sido la folklórica y el torero, ahora es el obispo y las monjas. 

El asunto un descontento con Roma, con la iglesia posterior al Concilio Vaticano II. Así comenzó el Palmar de Troya, con atuendos, procesiones y "monjas"salídas de debajo de las lozas, veremos este como termina porque tiene algún seguidor, y un buen convento.

Este hombre que ven aquí dando el cante, provocó un cisma en la iglesia hace cinco años por desacuerdos con Roma. Al Sr Rojas le gustan los toros, no es lo normal en el clero, pero si puede haber algunos que gusten de este nefasto espectáculo. El atuendo elegido es desde luego para llamar la atención. 

El capelo galero, de épocas pasadas, años 40 ha sido desempolvado, y la cruz de oro de dimensiones más que grande es para llamar a los cacos.

Al parecer Pablo Rojas era barman, y hacía muy buenos cocteles, siendo nombrado el jefe de los barman de Bilbao. En un momento dado se le pierde la pista , y lo siguiente que se sabe de él es que es obispo ¿Quién le nombró? Y como pudo ascender tan rápido, cuando a otros les cuesta años.

Los obispos tienen fama de gustar del lujo y la tontería, el besa manos, el anillo de amatista pomposo que suelen encargar en alguna joyería y alguna chalaura más, pero este riza el rizo.

Vive en una casa de 300 metros, con servicio domestico a la antigua usanza, es decir uniformado, tiene Valet de Chambre en español mayordomo y una casa de lo más rancio. 

¿De donde saca este hombre para vivir así?

En cuanto a las monjas, otras que tal bailan. Anda que si Jesús levantara la cabeza y viera el panorama montado por algunos se volvía a la tumba sin pensárselo.