¿Y si fue una trampa?
Algún enemigo de Pelayo conocedor de sus gustos, le pudo tender una trampa.Esto no lo he leído por ningún lado, pero pensando friamente lo que circula por Roma, pudiera ser.
Entre el joven periodista y Pelayo se produce un encuentro casual durante los últimos días de Francisco, a Pelayo le gusta y le invita a su apartamento a un aperitivo, ese día no sucedió nada, pero Pelayo le vuelve a invitar a una cena. Doy por sesntado que el periodista era gay o un buen actor por que a lo mejor no era ni periodista.
En este segundo encuentro pudo Pelayo tantear la situación y el periodista dejar caer algo?? en vista de eso, lo vuelve a invitar, ya estando "seguro" y cuando Pelayo decide meterle mano, según el Corriere de la Sera, el periodista sale corriendo y se refugia en la cocina, hasta que encuentra la puerta, y va directo a la policía para denunciarlo;la policía informa a la fiscalía y el Corriere de la Sera sabe la historia con detalles que por supuesto pública.A mi me extraña que Antonio Pelayo se lanzara al vacío sin tener una seguridad, además habrá que oir su versión.
Se ha dicho que el periodista se vio obligado a cambiarse de ciudad ante la insistencia del sacerdote,, pues tampoco me lo creo.
A mi esta historia me resulta extraña, no en el sentido de que no sea cierta, al parecer Pelayo era conocido en Roma, pero si de la forma que transcurren los hechos.A Pelayo se lo han cargado, posiblemente con motivo, pero la persona que actuó pudo hacerlo por encargo.
Era gay? o un profesional de la seducción? He leído sobre como funcionan estas cosas y no envian a cualquiera.
Y diría que Pelayo sabe quien puede estar detrás.
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